Cómo funciona el material de almohadilla térmica

La almohadilla térmica es un material de interfaz utilizado para llenar la brecha entre una fuente de calor como la CPU o la GPU y el disipador de calor. Su función principal es promover la transferencia de calor de una fuente de calor al disipador de calor.

La almohadilla térmica está hecha de un material suave y flexible, que puede ajustarse al contorno de la fuente de calor y el disipador de calor. Suelen estar hechas de silicona u otros materiales similares que son buenos en la conducción de calor.

Cuando se coloca entre la fuente de calor y el disipador de calor, la almohadilla térmica llena cualquier hueco y proporciona una ruta térmica directa entre las dos superficies. Cuando la fuente de calor se calienta, la almohadilla térmica absorbe el calor y lo transfiere al disipador de calor, donde el calor puede disiparse al aire circundante.

La almohadilla térmica es un material conductor que ayuda a disipar el calor. Suele estar hecho de polímeros rellenos de metal o óxido. Las almohadillas térmicas se utilizan para transferir calor de dispositivos semiconductores de alta potencia, como CPU y gpu, a radiadores u otras soluciones de enfriamiento.

Las almohadillas térmicas suelen colocarse entre los componentes de calefacción y los radiadores. La almohadilla térmica conduce el calor del componente al disipador de calor, donde el calor se puede disipar al aire circundante.

En general, las almohadillas térmicas son una forma eficaz y rentable de mejorar la transmisión de calor en los dispositivos electrónicos y evitar el sobrecalentamiento.

Placa disipadora de calor GPU

Las almohadillas térmicas suelen tener una conductividad térmica más baja que los metales, como el cobre. Sin embargo, tiene varias ventajas sobre los metales.

En primer lugar, las almohadillas térmicas son más fáciles de usar que los metales. En segundo lugar, la almohadilla térmica se ajusta a la superficie irregular y llena el hueco entre el componente y el disipador de calor.

Esto permite un mejor contacto entre las dos superficies, lo que genera una mejor transmisión de calor. Finalmente, las almohadillas térmicas suelen estar aisladas electrónicamente, lo que evita cortocircuitos.